Ignacio Llamas (Toledo, 1970) ha inaugurado el pasado 16 de diciembre la exposición VACÍOS. Se podrá visitar hasta el 31 de enero en la Galería Ángeles Baños, de Badajoz.

¿A qué se debe el título de la exposición?
“Vacíos” es también el título de la serie que tiene una mayor presencia en la exposición. Es una serie de obra en volumen en las que se trabaja el tema del paisaje o mejor dicho del territorio. Un paisaje desolado, árido, sin relieve, con poca vegetación y con escasos referentes visuales, pero, por esta razón muy cargado de significados. Son obras prácticamente planas en las que aparecen elementos como lindes, vallas o pequeñas viviendas.

¿Cómo plantea esta exposición?
Mi planteamiento expositivo, como en todas las ocasiones, parte del propio espacio. En él hay dos zonas diferenciadas, con unas características lumínicas distintas, lo que me ha permitido mostrar en una parte fotografía y en la otra obra en volumen. La obra en volumen, en mi caso, siempre lleva asociada una iluminación muy particular por lo que necesito que la sala esté totalmente a oscuras. Sin embargo la fotografía requiere una iluminación más convencional.

¿Qué puntos de convergencia y diferenciación hay entre las obras que va a exponer y las anteriores?
A nivel formal hay características que se mantienen como el blanco y la sensación de vacío pero los elementos que protagonizan estas últimas obras han variado, apareciendo las vallas y las alambradas. Quizás el mayor cambio ha sido el pasar de espacios cerrados con una presencia arquitectónica muy fuerte a espacios abiertos que son fragmentos de territorios o de paisajes.

A nivel conceptual sigo trabajando con el interior del ser humano y los espacios vacíos como metáforas de éste. Pero yo veo una gran evolución. Ya no hay tanta presencia de la parte positiva del ser humano y, en su lugar, hablo mucho más del dolor, un dolor tanto individual como colectivo. Estoy trabajando con diferentes aspectos de éste como son: el sentido de abandono, la angustia, la incertidumbre y la soledad.

En la última serie, que he titulado: “Vacíos” trabajo sobre todo el tema de los límites, como otro aspecto más del dolor. Reacciones psicológicas que nos producen miedo, frustración, angustia y dolor. Todos los tenemos, y son diferentes para cada uno. Son como las vallas rotas que aparecen en mis últimas obras. Si estás muy cerca de ellas, parece que te limitan el paso pero si lograras separarte unos metros te darías cuenta que este impedimento es solo aparente.

¿Qué proyectos tiene programados para el presente año?
Para este 2017 tengo previstas varias exposiciones en espacios institucionales. Las que ya están confirmadas son: la primera en el Museo de Santa Cruz de Toledo, una gran exposición en mi ciudad, donde hace muchos años que no expongo. Después otra en el Museo Provincial de Cáceres y una tercera en el Museo de Huesca.

Entrevista realizada a Ignacio Llamas por Javier Martín en enero de 2017.